He ido a la taquilla del metro de Madrid a comprar un bono10 en la estación de Palos de la Frontera alrededor de las 8 de la tarde. Desgraciadamente, sólo disponía de un billete de 50 euros, por eso precisamente he decidido ir a la taquilla, ya que no sabía si la máquina me daría cambio.
La señora de la taquilla estaba hablando por teléfono, y apuntando interesadamente en un papel, mientras yo esperaba llegó un chico. Al final se decide a atendernos y le pido mi bono y le entrego a la señora mi billete de 50 euros, añado que tengo los 15 centimos y ella me devuelve 4 euros. Me mira y me dice "¿qué pasa?", y le contesto que le había dado 50 euros y me había devuelto sólo 4 euros, me dice que es mentira que me ha dado 2 billetes de 20. Desconcertada le pregunto al chico si él había visto que me los hubiera dado y responde que el no ha visto que me los diera.
La señora del metro, me ignora y le atiende a el chico con intención de que este se marchara y yo me olvidara. Porque claramente tenía intención de quedarse con mis 40 euros. Insisto que no me los ha devuelto y que estoy dispuesta a que me registre en la garita, porque no me los había dado. El chico ante la situación en lugar de irse, se queda al lado, diciéndo que el no vió que me devolviera los 40 euros. Ante la negativa de irme, la señora del metro, indignada me dice que si no me los ha dado tendrían que estar en el cajon y se dispone a contar el dinero que queda y los apuntes del día. Mientras tanto entra a la garita una compañera suya y vuelve a hacer el recuento. El chico intentando tranquilizarme, me decía "no te agobies", y espero pacientemente que terminen el recuento sabiendo que la razón estaba conmigo pero temiendo lo peor.
Doy gracias a ese viajero amable, que a pesar de su prisa, se quedó conmigo para ver cómo terminaba el tema, me pregunto que hubiera pasado si él no hubiese sido "testigo activo", ya que con su apoyo después del recuento me devolvieron mi dinero.
5 comentarios:
Desde luego que gente hay por el mundo...Me alegro que todo acabara bien y que te apoyara el chico. Fue una ayuda y un consuelo. Según lo contabas me he puesto en tu piel y me ha subido la adrenalina. He lamentado no haber estado contigo....aunque hubiera sido capaz de cualquier cosa...
A Dios gracias fue un atraco sin violencia, de esos que sufrimos los consumidores cada día, de una manera u otra. Lo tuyo fue de una caradura que quería hacer el día, o bien que se había equivocado en algún cambio y vió en tí la victima propicia para recuperar lo perdido. Menos mal, que al final se solucionó, pero yo de tí presentaba una queja formal en la oficinas del metro o a traves de internet en atención al usuario.
Musus
Eso mas que un atraco me parace a mi mucha cara dura, seguro que esa bruja habia visto algún trapito que la gustaba y dijo, "esta es la mia con estos 40 euritos ya tengo para el caprichito"
Pobre que mal lo tuviste que pasar!!
Animo que al final todo acabó bien!!
Su
Ese tipo de situaciones son las que te hacen sentir impotente. Con lo que sí estoy de acuerdo es con lo que te ha sugerido Rodri a cerca de poner una queja para que quede constancia de la situación que has vivido, y si puedes identificar a la mujer que te atendió tanto mejor. No sé si valdrá de mucho, pero ese libro de atención al cliente los establecimientos están obligados a entregarlo en el momento de las inspecciones, y se les da más importancia de la que pensamos.
El mundo esta lleno de Hijos de Puta...
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