2013/01/15

Leyendo los Cien Mil Reinos

No sé qué me llevó a este libro, no conocía a la autora (N. K. Jemisin), ni tampoco es que sea muy aficionada a las luchas de poderes (aunque claro que me he leído al menos un par de libros de Juego de Tronos). Lo encontré, y me dió buena impresión, supongo que me apetecía leer una historia de una heroína...Empecé a leerlo y para mi sorpresa en la página 34 ya me había enganchado la historia. No, no me lo leí en una noche, soy más de leer un poco cada día, pero super enganchada, yo que me jacto de no ser una mujer de adicciones XDXDXD

Aún no lo he terminado, supongo que no pasará de hoy, pero no he podido evitar compartir mi emoción en este post, y quiero compartir también un concepto que aunque es ficticio, de otro mundo, otra lengua y otra época, sin embargo me parece tan propio en ésta. No sé por qué no existe un concepto así en nuestras lenguas.

Esai, en el libro explica que es una palabra que define la atracción por el peligro, por aquello que no nos conviene, o que de alguna forma nos lleva al final. Aquello que nos empuja a realizar los actos más irracionales y brutales, a morir en la guerra, a lanzarse a los brazos del hombre inadecuado... Va más a allá del deseo, más allá de la pasión,  bañado en lo  lo peligroso, inconsciente y dañino, pero que sin embargo, sin este sentimiento la vida carece de sentido.

Puede que sea el esai lo que si  mueve el mundo, más allá de las serendipias.



No hay comentarios: