Anoche tuve un sueño, vivíamos en una Red social. Todos nuestros eventos se subían directamente en esta red en forma de video, y recogía todas nuestras conversaciones se almacenaban con etiquetas. No teníamos que pensar una inteligencia artificial se encargaba de categorizarlo todo con #sendoshastags y de etiquetar a los contactos de nuestra red. La gestión de tu tiempo libre ya no era nuestra gestión, un recomendador te apuntaba a las actividades que consideraba. Ya no teníamos que controlar nuestros #malospensamientos, eran enviados directamente a un #educadormental #bigdata que se encargaba de almacenarlo al mismo tiempo que ordenaba un protocolario lavado de cerebro. El #blockchain era la tabla de multiplicar de los niños, una filosofía de gestión de base de datos de algún filósofo del pasado. No había políticos, un #chatboot se encargaba de comunicar el programa y un ejército de agentes virtuales los ejecutaban...
Desde nuestro nacimiento nuestras vidas estaban valoradas en términos de seguidores y solo se invertía en los individuos con mayor potencial social, #engagement lo llamaron. La sanidad se convirtió en un módulo de reparacion y reciclaje.
Nadie buscaba ser feliz por lo que entendieron que era un éxito. #felizdia
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